lunes, 14 de agosto de 2017


Día 1 Delhi
Empiezo a observar las fotografías de perfil de whatsaap para saber quiénes son las personas con quién viajaré a India e identificarlas en la cola de facturación. Sólo conozco a dos, Rosa y Elvira. Me da un poco de vergüenza... pero de perdidos al río. Me encuentro con la mamá de Sonu y se infunde un abrazo inmenso. Seguidamente llega el papá el cuál se alegra de verme también.
La gente está un poco nerviosa, para todos era la primera vez hacia mi India querida. Hacemos facturación y nos dicen que en el control de equipaje hay mucha gente, que podemos ir a bajo donde hay otro y estará más vacío. Increíble no hay nadieeee!!! Pasamos y ya entramos dentro! Así que a desayunar... no sabemos cuando podremos volver  a comer un bocata de jamón!! Hahahahaha. Mientras estamos allí descubrimos que dos compañeras de viaje sólo le dieron un boarding pass. El de Istanbul. Y el de delhi???  El chico les dijo que lo hicieran una vez lleguen allí. Pero será posible???  Vamos a información para ver qué se podía hacer, nos dicen que en el mismo momento de embarque se lo daban. Salvadas!!!

Ya estamos en Delhi, mi India querida. Cómo anhelaba sus olores, ese calor que te da en toda la cara nada más salir del aeropuerto... Fuera nos está esperando Pooja y Sonu. Reencuentros, saludos y empieza una nueva aventura en un nuevo lugar.

Estamos camino al hotel Vivek, amigos ya después de tantos años, y mis ojos no dejan de sorprenderse al ver este país. Ves una nueva evolución pero a la vez el estancamiento de siempre. Me quedé atónita al ver un panel solar en medio de la calle y justo al lado todavía gente viviendo en la calle, niños desnudos, sin ropa, jugando con los amigos ... hermanos....
No paro de ver la vegetación que hay, un verde intenso, parques.

Llegamos al hotel, dejamos mochilas, duchamos y nos dirigimos a la mezquita. Había mucha gente, algo muy raro. Resulta que era momento de oración y a los extranjeros no nos dejan pasar, hasta que no acaben. Decidimos irnos ya que faltaba todavía 1h. Visitamos la puerta de la india y finalmente acabamos en el templo Sijh. Vemos los diferentes espacios y decidimos que ya que estamos comer allí (dhal y verduras) muy bueno por cierto.

A la tarde nos dirigimos al hotel, mientras unos descansan, otros se encargan de cambiar dinero y a mi me toca ir con Sonu a dejar las maletas extras con champús, geles, ropa... en una compañía de autobuses para Udaipur.

Dia 2 Varanasi
Llegamos después de un viaje en tren toda la noche, de la que por cierto dormí por el cansancio en coma.  Salimos de la estación y llegó el momentazo de los rickshaws. 10 hombres alrededor de Pooja intentando llegar a un acuerdo de precios para llevarnos a un hotel. Y no me extraña que estuvieran con los ojos fuera de sus órbitas, ya que ves aparecer a 17 personas salir de la estación y es sinónimo de dinerooo hahahahha. Por fin nos ponemos de acuerdo con el dinero y nos distribuimos  en ellos. Madre míaaaa, empezó la carrera.. aquello parecía una competición a ver quién era más fitipaldi... ahora adelantamos nosotros, ahora los otros... todo ello mientras esquivabas las vacas que habían entorpeciendo el paso...
Después de la aventura llegamos al hotel delante del primer ghat. Desayunamos y nos alojamos.
Después de la ducha nos vamos a dar paseo por el ganges en la barca a motor. No dejo de admirar ese paisaje, sus gentes saludándonos desde la orilla  mientras lavan la ropa, mientras se duchan, mientras se dan un chapuzón. Esa paz que se respira mientras avanzamos. Observamos a lo lejos los rituales de cremación de los difuntos. Posteriormente vemos como los familiares se meten en Ganges formando parte del rito.
Llegó la tarde y nos dirigimos al ghat dónde hacen la pooja. Para ello nos montamos en una barca para poder verla bien. Empieza la ofrenda, disfruto cómo el primer día. Mucha paz, tranquilidad, sintiendo esos gongs, esa música, esos cantos a la vez que sigues con tu mirada cada uno de sus movimientos. Teníamos al lado nuestro a un señor que lo estaba dando todo, aplaudiendo sin control, moviendo la cabeza y cerrando los ojos. Estábamos metidas en una de las ofrendas más hermosas que hayamos visto nunca… hasta que… Carolina y yo percibimos un movimiento extraño que provenía de delante nuestra… algo se movía… una cucaracha enorme venía hacia  nosotras. Diosss  menudo salto dimos las dos hacia atrás!!! A partir de ese momento la tensión y el nerviosismo sea apoderó sobre nosotras!!! Empezaron a aparecer cucarachas por todos lados… derecha, izquierda, no dábamos abasto